Esto me da excusa de sobra para aunar las dos pelis en una misma entrada, ya que quería hablar de ellas pero de ninguna quiero decir demasiado.
Por un lado, Fantastic Mr. Fox me ha supuesto una decepción personal. Conecto con el cine de Wes Anderson, me encanta, lo disfruto y lo defiendo como el que más; aunque estoy de acuerdo con las críticas que más se repiten en torno a su obra, veo como una virtud lo que otros ven como defecto. Sin embargo, la belleza de las imagenes de esta adaptación del cuento de Roald Dahl no me permite olvidar el guión absolutamente plano y que no me ha despertado ningún interés. Todas las claves de estilo de Anderson están ahí, y sí, estética y técnicamente es una maravilla, pero en lo demás falla. No me he aburrido, ya que aparte de lo mencionado ciertos personajes me han gustado mucho y la banda sonora sigue al nivel habitual.

De Un Prophète sólo diré que es una de las mejores películas del año, perfectamente ejecutada, con un par de escenas que duelen y un personaje principal tremendo. No se hacen largas sus dos horas y media porque Audiard maneja los tempos de manera envidiable, y todos los elementos están al servicio de la historia. No he visto nada más de este director, pero me lo apunto en la lista de prioridades.

Pues yo creo que no.
ResponderEliminar